Organización de la Nueva España
Cortés, como Capitán General, fue el primer gobernante de la tierra conquistada. Su primer acto fue el de pagar a los capitanes y soldados que lo habían acompañado, a su propia costa, en la aventura. Echó mano de las tierras que habían sido del templo, del ejército y las no ocupadas para conceder Mercedes reales. Las unidades políticas que tributaban en especie o fuerza de trabajo en los mexicas, las concedió a sus capitanes (como "encomiendas") para que gozarán del tributo y del trabajo de los indígenas, con el simple compromiso de cuidar de su cristianización.
La corona
española había suprimido las "encomiendas", pero cuando llegó la
noticia ya se habían concedido y, para evitar problemas, se toleraron durante
una generación.
La disminución
de los indígenas agudizó la carencia de mano de obra. Según afirman los
cronistas "más de la mitad de la gente" murió con la epidemia de
viruela en 1520. A ésta se sumaron después los sufrimientos, la esclavitud y el
traslado forzado que provocaron suicidios y baja de natalidad el arribo de
otras enfermedades nuevas como sarampión viruela y tifón causaron estragos con
lo que al principal el siglo XVII, la población alcanzaba su índice más bajo.
El fin de las
campañas de conquista permitió que durante ese sitio la población empezar a
crecer, muy lentamente.
Se importaron
esclavos negros para proveer mano de obra, pero también apareció una nueva
forma de servicio indígena forzado, el repartimiento, pero asalariada y
temporal. Cada comunidad tenía que otorgará un número de indios, los que
tuvieran entre dieciocho y 60 años, para construcciones, agricultura o minas,
distribuidos por jueces repartidores, casi siempre alcaldes mayores poco
regidores.
Los nobles
mantuvieron sus tierras y los gobernantes indígenas fueron reconocidos como
caciques, lo que facilitó de su hispanista acción
Organización política
La partido de
corte social las hibueras dejó el gobierno a la primera audiencia, que cometió
muchos abusos, por lo que se nombró una segunda, que logró enderezar los que
imponer cierto orden.
La importancia
de las tierras conquistadas era tal, que en 1535 se estableció el virreinato.
Este duró hasta 1821 y sufrido dos cambios importantes: el de 1786 con el
establecimiento de las doce intendencias que redujeron la autoridad fiscal,
militar y administrativa del virrey y el derivado de la constitución de 1812
que apoyo a los reyes y dos sustituyó por jefes políticos, además de crear
ayuntamientos constitucionales y diputaciones presidenciales.
El centro del
poder estaba en España, que la corona había delegado en el real y supremo
consejo de indias que tenía poderes legislativos, ejecutivos y judiciales.
La estructura
legal de la nueva España la constituía el cuerpo de reales cédulas y órdenes
conocidas con el nombre de leyes de las indias. Estas intentaban implantar
justicia los indígenas, aunque no siempre fue así en la práctica. Mas los
indios no fueron sujetos pasivos aprendieron a contender en los tribunales para
defender sus derechos; adquirieron la fama del elitista, gracias a lo cual
lograron ganar muchos casos, lo que demuestra que las leyes no fueron letra
muerta. Cuando se alteraba la tranquilidad del virreinato, el consejo de indias
enviada visitadores, para estudiar la situación y solucionar la en el lugar
mismo.
En el
virreinato recibían las autoridades que ponían en práctica las decisiones del
consejo y las leyes de indias. La primera autoridad llega la audiencia,
presidida por el virrey informada por valiosos oidores. Constituía el tribunal
superior y consejo administrativo del pri y tenía autoridad sobre todos los
asuntos, excepto los militares y fiscales. En 1572 se estableció en su seno, el
juzgado General de indios, destinado a impartir justicia a los naturales. Dada
la extensión del territorio, se creó después la audiencia de nueva Galicia,
subordinada a la de México.
El virrey era
representante del rey, Capitán General y Presidente de la audiencia llega
sustituido por ello está en caso de ausencia o de muerte. Estaba sujeto a un
juicio de residencia sobre su desempeño honesto, al final de su gestión.
Para las
provincias de Yucatán, nueva Vizcaya, nuevo León y nuevo México se nombraban
gobernadores. En los distritos habían jefes gubernativos y jueces llamados Q
regidores hubo alcaldes mayores; estos recaudaban tributo y decidían asuntos
judiciales y también recogían y distribuían productos de los comerciantes que
les habían comprado el puesto.
En las
ciudades y poblados había cabildos formados por alcaldes y regidores elegidos
para su administración. En las ciudades españolas los puestos se compraban, por
lo que los controlaban unas cuantas familias. Los cabildos de pueblos indígenas
eran electos popularmente y estaban bajo la influencia de los religiosos. Estos
pueblos mantuvieron sus antiguos jefes indígenas hasta el fin de la colonia.
La iglesia
formaba parte del estado ya administraba no sólo la religión sino gran parte de
la educación y las instituciones de beneficencia. Estaba dividida en el clero
secular irregular. Durante el siglo XVI estuvo dominada por las órdenes
religiosas, pero a partir del XVII los monarcas se empeñaron en secularizarla,
lo que causó enfrentamientos entre autoridades civiles y religiosas.
El tribunal
del Santo oficio o inquisición perseguía a individuos que practicaran queridos
prohibidos en el imperio: judaísmo protestantismo e islamismo; no tenía jurisdicción
sobre los indios porque eran cristianos nuevos.
Esas
instituciones descansaban en una extensa burocracia, por un lado civil y fiscal
y por otra la eclesiástica, lo que causaba un traslape disfunciones, que servía
para que las autoridades se vigilarán unas a otras, pero que desembocaba en la
ineficiencia. Otro obstáculo del funcionamiento fue el cuerpo extenso de leyes,
algunas veces contradictorias que favorecían la corrupción. Los decretos
recibidos de España algunas veces eran inaplicables, lo que obligaba a aplicar
el " obedézcase pero no se cumpla". Es un tenía un objetivo
importante: se recibió por ser orden real, pero se rexpedía por que era inaplicable, junto a una
larga representación solicitando su abolición.
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