1.4- La Sociedad Colonial.

En el territorio que hoy es México los españoles tropezaron por primera vez con un imperio indígena y tuvieron que hacerse ajustes a los esquemas de poblamiento y urbanización experimentados en las islas del Caribe. Cortés mantuvo el orden visita al que sólo descabezó, disponiendo sólo de las tierras del estado y de los templos indígenas para las Mercedes de sus capitanes. Los indios que las abarcaban se les encomendaron, pero los nobles indígenas mantuvieron sus tierras y el vasallaje de sus súbditos.

Encomendé rosita y les tenían proyectos sociales diferentes, pues desde los primeros deseaban una sociedad de Señores españoles, los frailes pretendían una sociedad indígena hijita por ellos. Las dos iban a ser plan desplazadas por la corona en la década de 1560 con el primer intento de secularización: se suprimieron las encomiendas, se apoyó el vasallaje de los indígenas y se extendieron los municipios a sus poblaciones, con lo que se mediatizaron los dos cacicazgos con los funcionarios electivos. Las repúblicas de indios y que españoles quedaron sometidos a la corona. Los españoles estaban acostumbrados a las mesas de diversos grupos con costumbres, lenguas y aun de religiones distintas, pero impusieron su religión y uno orden que exigía que cada grupo se vistiera de actuar hace un lugar en ese mundo.

Los frailes impusieron el caso ni la camisa de manta para los indios y estos adoptaron el sombrero europeo tan útil para el sol de los trópicos.

La separación deseada por la corona y los frailes terminaría por reducirse, pues muchos indios irían enterando en las ciudades españolas, ya atraídos por los propios españoles, ya huyendo del pago del tributo. Pero por lo pronto, fueron congregados en pueblos puntos esto se formaron en las antiguas cabeceras políticas, trazando calles en forma rectangular, a la manera renacentista, que rodeaban el convento. Los pueblos conservaron su nombre, agrandando les el de un Santo patrón. Las chozas indígenas continuaron siendo las mismas.

Los indios se fueron ajustando a las exigencias de su nueva religión que organización. Algunos aprendieron español (los ladinos) y aprovecharon la comunicación con los encomendé los para ascender socialmente. Los frailes estimularon la fundación de cofradías de indios para organizar fiestas, auxiliar a los necesitados y pagar los servicios religiosos. De esa manera las congregaciones de indios tendrían a la religión como principal base de cohesión.

Los nobles mexicas sobreviviente se hispanizaron a través de los colegios fundados desde 1523, destinados a Cristianizarlos y prepararlos para dirigir a sus pueblos o para entrar en el sacerdocio, como en el colegio de Santa Cruz de Tlatelolco. Los nobles indios aprendieron latín y español y pudieron preparar un herbario y auxiliar a Fray Bernardino de Sahagún en su historia General de las cosas de la nueva España. Por desgracia, más tarde fue combatido y perdió sus ambiciones convirtiéndose en una instrucción menor. La nobleza indígena que sobrevivió intacta fue la de Guajardo, aunque para mantener su tierra y privilegios se hispanizo y se concentró en la capital Antequera. Los nobles mayas, sobre todo en Chiapas, sufrieron una persecución sistemática, por lo que el pequeño grupo sobreviviente iba organizar constantes levantamientos. Los indios mantuvieron un status especial y ciertos privilegios, a pesar de que algunos los fueron perdiendo lo largo de los siglos.

La mezcla entre indios españoles se inició con la doncella es que otorgó el cacique de tabasco a los conquistadores, entre ellos la célebre malinche. Más tarde, los españoles casaron con indias nobles para asegurar tierras y privilegios, cuya descendencia mantendría la tradición histórica del pueblo de sus Madres, cómo podemos darnos cuenta en tal obra de Diego Muñoz Camargo, historia de Tlaxcala.

A la mezcla racial se iba a ser más compleja con la importancia de esclavos negros y algunos filipinos y chinos que se convirtieron en servidores de moda. Para fines del XVI que había tantos africanos como españoles trabajando en los ingenios, obrajes o minas. El contacto entre los grupos humanos dio por resultado toda una gama infinita de mezclas y una gran jerarquización social que hizo fracasar el modelo social de las dos repúblicas, de indios y de españoles.

El surgimiento de grupos no previstos, mestizos, mulatos, zambos causó desagrado por su dudosa identidad y dio origen a prejuicios españoles. Cuando los mestizos fueron producto de una unión legítima se consideraban parte de la república de españoles pero estos fueron los menos, la mayoría pasaron a vivir en las comunidades maternas, aunque se sintieron diferentes. El virrey Mendoza, preocupado por los mestizos semi abandonados, fundó el colegio de Letrán para acogerlos.

En la base de la pirámide social que se constituyó, estuvieron las castas, o sea, el producto de los múltiples maestros raciales. Mestizos y castas no podían aspirar a " ocupaciones honrosos", pero penetraron en los gremios y muchas veces han iniciado unos ranchos. La movilidad social se lograba por golpes de suerte económica, sobre todo en las minas y en el norte.

La jerarquización social que rigió en el área mexica no fue rígida en la frontera chichimeca, donde prevaleció la convivencia entre indios, españoles y negros, pues la mano de obra en escasa. El uso del caballo, la portación de armas y el vestido no se rigieron por la reglamentación y surgió una sociedad más libre. Los ingenios y trapicheos ocuparon de preferencia al negros y mulatos, quienes también dominaron la espera de capataces en las minas.

Los españoles monopolizaron las altas esferas sociales y económicas; cuando no casaron con indias trajeron a sus mujeres de España, sobre todo en el siglo XVI. La primera ciudad española, México, aprovechó las ruinas de la gran capital mexicana pero con una traza renacentista: su plaza central iba ferrovial la después por catedral, palacio de gobierno, ayuntamiento y audiencia. Los españoles obtuvieron Solares para sus casas y los religiosos para sus templos y conventos. Alrededor de la ciudad española surgieron barrios indígenas que mantuvieron casi su antiguo aspecto.

El mosaico humano quedó unidos sólo por la religión y su adhesión a la corona, vio surgir una naciente identidad expresaba por los criollos, que se sentían diferentes y acuñaron como símbolo a la virgen de Guadalupe, una dirige en India, es decir, propia del lugar.